Estos son términos que solemos utilizar, unos más en desuso que otros, para designar a nuestras publicidades de pequeño formato en gramajes de papel no muy altos y que suelen distribuirse en reparto masivo aunque con la impresión digital las tiradas pueden ser cada vez más reducidas.
Nos ha llamado mucho la atención los orígenes de estas terminologías.
El nombre de pasquín viene derivado de un zapatero italiano muy cotillo, llamado Pasquino, que en una reforma de su zapatería encontró una estatua a la que le dio uso de tablón de anuncios en el que todo el mundo colgaba, en pequeños trozos de papel, sátiras, noticias y pequeñas denuncias del entorno y la época.
Mucho más sencilla es la explicación de octavilla ya que se denominaba así a la publicidad que solía ir en formato pequeño, una octava parte de un folio.
Fly es volar en inglés y es a partir de la segunda guerra cuando se empieza a utilizar el término flyer que se va extendiendo con las sucesivas guerras, ya que se tiraban desde los aviones de combate láminas propagandísticas utilizadas como arma masiva propagandística con objetivos desmotivadores.
Hoy día este tipo de impresos ha evolucionado con las técnicas de diseño y los avances tecnológicos de la industria gráfica y a pesar de algunos detractores por la no segmentación del público objetivo sigue siendo un medio publicitario muy a tener en cuenta por su bajo coste.